¿Cómo será el mundo en unas decenas de años?, ¿qué adelantos tecnológicos habrá?, ¿se acabará el mundo y el hombre vivirá en el espacio? Éstas y algunas otras interrogantes encontrarán las más divertidas respuestas en la última entrega de la casa Disney, filme en honor a una de las emblemáticas tierras de Disneylandia: Tomorrowland. La historia nos cuenta acerca de una niña que encuentra un pin, el cual la traslada a otro lugar en el tiempo y el espacio. Casey, el personaje de Britt Robertson, investigará el origen del pin y dará con un genio, interpretado por George Clooney, que ha perdido la esperanza. Pero Casey puede ser lo que habían estado esperando, y decide mostrarle lo que es Tomorrowland: un lugar en el que las mentes más brillantes buscan la salvación de la humanidad. La cinta es escrita y dirigida por Brad Bird, un hombre cuya carrera ha sido marcada por películas animadas (destacan “Los Increíbles” de 2004 y “Ratatouille” de 2007), y por su declarada influencia por el cine de Spielberg. Ahora, con un presupuesto abominable y una mente prodigiosa, es capaz de conjugar la imaginación de la ciencia ficción con la aventura juvenil. El gran mérito del director es entretener al 100% y simultáneamente poner a pensar al espectador. Partiendo de la premisa de que los pensamientos pueden ser más poderosos que las acciones, Tomorrowland en un filme con grandes mensajes para chicos y grandes; mensajes que trascienden y contagian a la audiencia. Entre ellos: “el futuro es de los que nunca se rinden”. Todo el concepto visual es avasallador: gran creatividad e imágenes inventivas. El filme es una ráfaga de efectos especiales que nos demuestran que nada es imposible ya para el CGI; lo que diga se quedará corto. Por su parte, el elenco es poderoso, comandado por George Clooney mostrando una naturalidad arrolladora, Hugh Laurie cumple, y quienes se llevan las palmas son las féminas de la cinta. Casey Newton y Athena, Britt Robertson y Raffey Cassidy respectivamente, rompen el molde; la química entre ambas se disfruta enormemente. No se diga más, aborda tu sala Cinépolis más cercana y emprende el viaje hacia “Tomorrowland”, lo que vas a presenciar será inédito para tus ojos… y te va a encantar.